5 de diciembre de 2007

REALEZA Y POLÍTICA: Carlota Casiraghi

Como viva imagen de su madre y abuela, no era para menos esperar que heredase la belleza que su progenitora ha hecho patente desde su juventud. La elegancia es un factor clave en esta familia sentenciada a más de una desgracia, pero la vida sigue y por ello Char ha sabido dar un toque juvenil y desenfadado en palacio. Una vez fallecido su abuelo, el rey Rainiero de Mónaco, han sido más frecuentes sus apariciones en acontecimientos de carácter social.

Carlota, denominada por muchos la más bella de las princesas europeas, destaca por sus gruesos labios, ojos claros enmarcados en anchas cejas junto a un estilizado cuerpo, procedente seguramente de los genes de su tía, Estefanía.

A la hora de vestir se decanta por pantalones vaqueros, camisetas y cazadoras como básicos para el día. A menudo excede sus estilismos sobrecargándolos de prendas, a pesar del clima, abusando de superposiciones de bufandas o foulards (gran fanática). Le encantan los complementos: pendientes grandes, bolsos vintage, pulseras de tela y…los ya mencionados foulards, pashminas y bufandas... Mientras que en verano, como cualquier joven de su edad, prefiere la comodidad proporcionada por unos shorts o un vestido ligero acompañado de sandalias.

Pero en el momento que debe presentarse como miembro de la realeza monegasca no defrauda. Siempre con vestidos vistosos, ya sea por el corte o los tejidos, siempre que puede dejando entrever una silueta digna de cualquier deportista. Luce como nadie las creaciones de los mejores diseñadores, aunque se muestra fiel a Karl Lagerfeld, íntimo de su madre y de ella. En cuanto a colores, no se arriesga y busca la elegancia del negro o, en contadas ocasiones recurre a la gama de verdes y azules.

Algo muy personal: Un moño desaliñado que ella misma se hace en un instante siempre que su larga melena le estorba.


Como una chica más de sus edad, Char prefiere los vaqueros como prenda básica en su armario.



No descuida nunca sus estilismos.En este caso con unas botas de Chanel. Un mix blanco y negro siempre acertado



En un acto oficial de la corona Monegasca, Carlota lució este precioso vestido turquesa junto al bolso clásico de Chanel y su ya característico moño

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